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EL BOREUT: NUEVOS RETOS

Por Eylin Del Rosio Mauricio Ávila

El Boreout es un fenómeno psicosocial relativamente nuevo, que ha comenzado a ganar atención en las últimas dos décadas, especialmente en el contexto de trabajos modernos con rutinas automatizadas, escasa carga laboral o tareas poco significativas.

Aunque no se encuentra aún en los manuales diagnósticos como el DSM-5 o la CIE-11, el Boreout ha sido identificado por psicólogos organizacionales como una problemática emergente que afecta la salud mental de los trabajadores, con consecuencias similares a las del conocido Burnout, pero por causas completamente distintas.

Las personas que experimentan Boreout pueden presentar síntomas tanto emocionales como físicos, entre ellos:

  • Aburrimiento constante durante la jornada laboral.
  • Sensación de vacío o inutilidad profesional.
  •  Falta de motivación, incluso en actividades cotidianas fuera del trabajo.
  • Irritabilidad, fatiga emocional o dificultad para concentrarse.
  • Apatía y tristeza, sin una causa aparente.

En casos prolongados, puede derivar en síntomas depresivos y trastornos de ansiedad.

Prevenir este síndrome implica una responsabilidad compartida entre el trabajador y la organización. 

Algunas estrategias eficaces incluyen: 

A nivel organizacional:

  • Promover la rotación de tareas y la innovación.
  • Fomentar un liderazgo participativo y comunicativo.
  • Implementar espacios de diálogo para identificar talentos desaprovechados.
  • Incentivar el aprendizaje continuo y el crecimiento profesional.
  • Ofrecer retos moderados y tareas alineadas a los intereses de cada colaborador.

A nivel individual:

  • Comunicar de forma proactiva el deseo de asumir nuevos retos o responsabilidades.
  • Buscar formación adicional para enriquecer el perfil laboral.
  • Reflexionar sobre el propósito personal y profesional.
  • Practicar actividades fuera del trabajo que fortalezcan la autoestima y la creatividad.
  • Considerar un cambio laboral si el entorno es rígido o desmotivador a largo plazo.

Y aunque se crea que no tener nada que hacer en el día, es un trabajo soñado, la realidad es que “No siempre el exceso agota, a veces el vacío también desgasta.”

Conoce a nuestra redactora

Eylin Del Rosio Mauricio Ávila

 Licenciada en psicología  


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